Macron y el momento de
Hegel
En relación con la Unión
Europea, Macron quiere situarse en la línea de los visionarios y no de los
gestores, de los filósofos y no de los burócratas. En Atenas, este septiembre,
en la colina de Pnyx, alcanzó este punto alto de su oratoria: “Miren el tiempo
que vivimos: es el momento del que hablaba Hegel, el momento en que la noche
cae y donde la lechuza de Minerva levanta el vuelo”.
Macron, primer presidente
culto de Francia en mucho tiempo, habló al atardecer con la Acrópolis al fondo.
Era esencial ir a Atenas, dijo, porque significaba regresar a las
fuentes para hablar de la democracia. Habló en la misma colina de los
oradores en la que, sesenta años antes, Malraux pronunciara un discurso memorable. Y estuvo a la altura de las
circunstancias, aunque la cita de Hegel quizás sobrevaloró la cultura
filosófica de sus oyentes, porque no explicó la metáfora: Minerva es la diosa
de la sabiduría, la lechuza su atributo y esta lechuza, decía Hegel, espera la
noche para sobrevolar el gran campo de batalla de la historia. Dicho de otro
modo, la filosofía llega después de la acción y con cierto retraso. Sí explicó,
en cambio, Macron que la lechuza trae la sabiduría, aunque siempre mira hacia
atrás “porque es más fácil y tranquilizador mirar lo que tenemos, lo que
conocemos, más que lo desconocido...”. […]
Para la Unión Europea, para
ese “último bastión” […], podría resultar crucial, cuando tantos y tan
diferentes monstruos la quieren borrar del mapa, que aún queden gentes con
arrestos como Macron que piensen que en algún momento Minerva levantará el
vuelo y sabrá recordarnos que, a pesar de que no paramos de retroceder hacia lo
irracional, el fin último de la
historia es un fin universal y conduce al desarrollo pleno del saber. No nos
queda otra salida que reencontrar la constancia de la razón y buscar con fuerza
un renacimiento de Europa. Ha llegado el momento del coraje y de la sensatez
y de tomar decisiones que encaucen el gran camino de la Unión.
Enrique Vila-Matas,
El País, 09/01/2018